martes, 7 de diciembre de 2010

Cristianismo

I. Introducción
El cristianismo comienza durante la época donde las escuelas helenísticas eran consideradas como las representantes de la ética. Cuando llega el cristianismo, todo cambia porque con este surge una nueva manera de filosofar.
Muchos afirman que el cristianismo es una filosofía pero es muy diferente por lo que no se le debe de considerar como tal. Para darnos una idea de la diferencia entre una religión y una filosofía, la siguiente información nos abrirá paso al verdadero conocimiento de las características de esta religión:

FILOSOFÍA
-Todo lo problematiza, lo cuestiona, establece duda.
-Es la búsqueda del saber.
-Hay filosofías que demuestran la existencia de Dios y hay filosofías que rechazan su  existencia.
-Se apoya en la razón humana.
-Considera a Dios como problema, pero no puede probar si Dios existe o no.
-No puede resolver el problema de si el mundo tuvo comienzo o no, si tendrá fin o no.
-Acepta la rectificación de sus enunciados.

RELIGIÓN
-Es un modo de vida.
-Explica los problemas del universo y la vida, partiendo de la fe.
-La existencia de Dios es una verdad indiscutible.
-Considera que Dios es el origen de todo, el fin del mundo depende de la voluntad divina.
-Es estrictamente afirmativa.
-Considera a Dios como principio de todas las cosas. Todo cuanto existe deviene de Dios.
-No cuestiona a Dios.
-Consiste en creer en cosas que no se ven.

Objetivo de la religión:
Salvar a los hombres por medio del sacrificio que Dios hizo de enviar a su único hijo a la Tierra para que fuese crucificado y así cargar con los pecados de los hombres. Cabe mencionar que Dios también es Cristo, y junto con el Espíritu Santo conforman la trinidad.

Otra característica de la religión cristiana es que ha perdurado por muchos años a comparación de las otras escuelas helenísticas que también surgieron alrededor de esa época. ¿Por qué esta perduró y las otras no?

Es simple, porque plantea bases firmes (reglas y normas bien fundamentadas) y sencillas para que los humanos podamos recordar con facilidad y así las llevemos a cabo, por eso ha durado y ha modificado todas las facetas de la vida a lo largo de los siglos.

La religión por medio de la fe resuelve los problemas que la filosofía plantea racionalmente.


II. Contexto Histórico-Social 



Antes de surgir el cristianismo como tal, existió “El cristianismo primitivo” (Primera etapa del cristianismo), que eran sectas cristianas derivadas del judaísmo, las cuales sólo consistían en obedecer los diez mandamientos y así poder alcanzar el bien, el cual es Dios. A este cristianismo primitivo también se le conoce como “Ética pastoral cristiana”, porque carecía de especulaciones filosóficas abstrusas, como las surgieron después.

A medida que el cristianismo se va difundiendo, surge la necesidad de crear un cuerpo doctrinal, el cual sea capaz de explicar los dogmas del cristianismo. Y entonces el cristianismo entra a una nueva etapa: La patrística o de los padres de la iglesia.
Y así aparecen los padres apostólicos, sus obras eran sencillas pues instruían y exhortaban a aspirar a perpetuar la fe y la vida cristiana. En el siglo II aparecen los padres apologistas, los cuales pretendían defender los dogmas cristianos contra las herejías. Después surgen los padres catequistas que hacían interpretaciones más científicas.
A finales del siglo IV las actividades científicas se consolidan y entonces el cristianismo entra a la edad de oro de los padres de la iglesia. Esta época destaca por realizar una síntesis del pensamiento pagano o griego con el cristianismo. De aquí sobresale San Agustín, quien basándose en la filosofía de Platón, realiza una de las primeras síntesis entre la filosofía griega y cristiana; y de esta forma hace posible una filosofía cristiana.

Más tarde en la edad media surge un movimiento llamado Escolástica, el cual represente la madurez de la filosofía cristiana. El término escolástico, proviene del saber que era impartido en las escuelas conventuales y universidades, y más tarde significó un saber de carácter filosófico y teológico que fundamentaba y enseñaba la doctrina de la iglesia como un sistema científico. El auge de la escolástica ocurre en el siglo XIII, en la época de oro de la teología y la filosofía escolástica.
En el siglo XII en Francia e Inglaterra, ya son centros privilegiados de la cultura filosófica. Y a las universidades de Paris y Oxford, llegan todos los que se interesan en la especulación filosófica.
La escolástica se apegaba al principio de la autoridad, el empleo del método deductivo o silogístico y la preocupación por conciliar la fe con la razón.



III. San Agustín

Es considerado como el padre de la iglesia. Nació en Tagaste, Numidia, (hoy Souk-Ahras, Argelia) el 13 de noviembre de 354. Sus padres fueron Patricio, un hombre violento y pagano y Santa Mónica, dulce y de hondas virtudes cristianas.
Desde su infancia hasta los 32 años tuvo una vida pagana. Entre los 15 y 30 años vivió en unión libre con una mujer cartaginesa cuyo nombre se desconoce, con la que tuvo un hijo al que llamaron Adeodato. Finalmente decide cambiar realmente su vida y volverse a la religión cristiana apoyado por las pláticas que oyó de San Ambrosio en un viaje a Milán y quedando impresionado y admirado de sus predicaciones. A partir de ese momento toda su vida se volvió cada vez más y más religiosa.
Tenía un temperamento ardiente y apasionado, sus influencias fueron principalmente sus  padres. Escribió alrededor de 30 obras en 40 años. Falleció el 28 de agosto de 430 durante la invasión de los vándalos a Hipona.
Obras:

·  “Confesiones”, una autobiografía de 13 tomos, que es donde San Agustín se muestra más grandioso.
·  “Contra Académicos”, combate a los escépticos
·  “Soliloquios”, diálogos del alma con Dios.
·  “De la vida Beata”
·  “De la Trinidad”, consta de 15 libros
·  “La ciudad de Dios”, que fue la primera filosofía desde el punto de vista filosófico y consta de 22 libros.
·  “De la inmortalidad del alma”

IV. Santo Tomás De Aquino 

(Llamado Doctor Angélico; Roccaseca, actual Italia, 1224-Fossanuova, id., 1274) Teólogo y filósofo italiano.
Hijo de una de las familias aristócratas más influyentes de la Italia meridional. Estudió en Montecassino, Posteriormente se trasladó a Nápoles, donde cursó estudios de artes y teología y entró en contacto con la Orden de los predicadores.
Allí conoce a los Padres Dominicos y se entusiasma por esa Comunidad. Quiere entrar de religioso pero su familia se opone. El religioso huye hacia Alemania, pero por el camino lo sorprenden sus hermanos que viajan acompañados de un escuadrón de militares y lo ponen preso.
No logran quitarle el hábito de dominico, pero lo encierran en una prisión del castillo de Rocaseca.
Tomás aprovecha su encierro de dos años en la prisión para aprenderse de memoria muchas frases de la S. Biblia y para estudiar muy a fondo el mejor tratado de Teología que había en ese tiempo, y que después él explicará muy bien en la Universidad.
Sus hermanos al ver que por más que le ruegan y lo amenazan, no logran quitarle la idea de seguir de religioso, le envían a una mujer de mala vida para que lo haga pecar. Tomás toma en sus manos un tizón encendido y se lanza contra la mala mujer, amenazándola con quemarle el rostro si se atreve a acercársele. Ella sale huyendo y así al vencer él las pasiones de la carne, logró la Iglesia Católica conseguir un gran santo.

Lo enviaron a  Alemania, a estudiar con el más sabio Padre Dominico de ese tiempo: San Alberto Magno.
Los monjes le enseñaron a meditar en silencio. Es el más piadoso, meditabundo y silencioso de todos los alumnos del convento. Lo que lee o estudia lo aprende de memoria con una facilidad portentosa.
Al principio los compañeros no imaginaban la inteligencia que tenía Tomás, y al verlo tan robusto y siempre tan silencioso en las discusiones le pusieron de apodo: "El buey mudo".
 Pero un día uno de sus compañeros leyó los apuntes de este joven estudiante y se los presentó al sabio profesor. San Alberto al leerlos les dijo a los demás estudiantes: "Ustedes lo llaman el buey mudo. Pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero". Y así sucedió después.
A los 27 años, en 1252, ya es profesor de la Universidad de París. Sus clases de teología y filosofía son las más concurridas de la Universidad.
En 4 años escribe su obra más famosa: "La Suma Teológica", obra portentosa en 14 tomos, donde a base de Sagrada Escritura, de filosofía y teología y doctrina de los santos va explicando todas las enseñanzas católicas. Es lo más profundo que se haya escrito en la Iglesia Católica.
Santo Tomás logró que la filosofía de Aristóteles llegara a ser parte de las enseñanzas de los católicos. Este santo ha sido el más famoso profesor de filosofía que ha tenido la Iglesia.
Su humildad: Cumplía exactamente aquel consejo de San Pablo: "Consideren superiores a los demás". Siempre consideraba que los otros eran mejores que él. Aun en las más acaloradas discusiones exponía sus ideas con total calma; jamás se dejó llevar por la cólera aunque los adversarios lo ofendieran fuertemente y nunca se le oyó decir alguna cosa que pudiera ofender a alguno. Su lema en el trato era aquel mandato de Jesús: "Tratad a los demás como deseáis que los demás os traten a vosotros".
Murió el 7 de marzo de 1274 a la edad de 49 años.
Obras:
·         Tres síntesis teológicas
·         Nueve exégesis sobre las Sagradas Escrituras Once exposiciones sobre los trabajos de Aristóteles
·         Dos exposiciones de trabajos de Boecio
·         Dos exposiciones de trabajos de Proclo
·         Cinco opiniones expertas, o responsa
·         Quince letras sobre teología, filosofía o temas políticos
·         Ocho tratados sobre teología



V. Filosofía Cristiana
1.    Santo Tomás
Seguidor de Aristóteles, Santo Tomás logra hacer al pensamiento aristotélico  compatible con la doctrina cristiana, razón que sin duda explica el éxito que tuvo en toda la cultura cristiana medieval y moderna. No es menor mérito de Santo Tomás el equilibrio que parece lograr entre la razón, y la fe y su ejercicio y su práctica; los dos ámbitos le interesaron, aunque, el motor de su extraordinario esfuerzo filosófico fue la experiencia religiosa que siempre le acompañó. Por su relevancia e influencias en la historia de la filosofía y, más aún, por mostrarnos una posibilidad del pensamiento (acercarse a lo sagrado y absoluto), Santo Tomás es un filósofo para todo aquél que se atreva a pensar con radicalidad la vida humana y el mundo. 
Para Santo Tomás la existencia de Dios no era evidente por sí misma, si no que para comprobar esta existencia se tenía que utilizar la razón. Para esto él formulo 5 vías para comprobar la existencia de Dios, las cuales se desarrollaran a continuación:
PRIMER VIÁ: VÍA POR EL MOVIMIENTO
·         Todo lo que se mueve es movido por otro: el movimiento es el paso de la potencia al acto, lo que se mueve tiene que estar en potencia respecto de aquello hacia lo que se mueve y, por lo tanto, no puede moverse a sí mismo.
·         El proceso por el que una cosa mueve a otra no se puede prolongar indefinidamente puesto que en tal caso no se llegaría al primero que mueve y no habría motor alguno ni movimiento, pues los motores intermedios no mueven más que porque son movidos por otro.
·         Por lo tanto, esta primera vía concluye en que debe existir un primer movimiento, que mueve a los otros, el cual es Dios.
SEGUNDA VÍA: VÍA POR LAS CAUSAS EFICIENTES
·         No puede ser posible que algo sea causa eficiente de sí mismo (pues sería anterior a sí mismo, cosa imposible).
·         No es posible una causa eficiente sin un efecto, de esta misma: si se quita la causa, desaparece el efecto, por lo que si en el orden de las causas eficientes no existiera la primera, no se daría tampoco ni la última ni la intermedia.
·         Por lo que concluye que existe una primera causa eficiente: Dios
TERCER VIÁ: VÍA POR LA CONTINGENCIA
·         Las cosas pueden existir o no existir (son contingentes).
·         Si ahora existen cosas tiene que ocurrir que exista un ser necesario, pero este ser necesario no puede tener su existencia a partir de otro ser puesto que en tal caso no sería propiamente necesario.
·         Tiene que existir un ser que sea absolutamente necesario cuya causa de su existencia y necesidad no esté en otro sino en él mismo y que sea causa de la existencia de los demás, y éste es Dios.
CUARTA VÍA: VÍA POR LOS DIFERENTES GRADOS DE PERFECCIÓN 
·         Los valores se dan en las cosas, en unas más y en otras menos. Al decir que algo es más y algo es menos es porque se aproxima o se aleja a lo máximo.
·         La perfección que encontramos en los seres no puede tener su origen en algo menos perfecto sino en algo más perfecto (existe un modelo de perfección).
·         Por lo que se concluye que debe existir un modelo de los que se derivan los diferentes grados de perfección: Dios
QUINTA VÍA: VÍA POR EL ORDEN EN EL MUNDO
·         Hay cosas que no tienen conocimiento o consciencia de su fin (existencia), como son los cuerpos naturales, que obran por un fin.
·         Ya sean los seres no racionales, que actúan sin decidirlo. Como la abeja que hace la miel; ella no sabe por qué la hace sino que simplemente lo hace.
·         Por lo que las cosas que no tienen conocimiento tienen que ser dirigidas por alguien con conocimiento e inteligencia. Por lo que, hay un ser inteligente que dirige a las cosas a un fin, y ese ser es Dios.

LA VIRTUD
Santo Tomás tenía una idea muy parecida a la aristotélica sobre la virtud, creía que la virtud era el punto medio entre el vicio y el defecto, a lo que él llamaba conformidad. Esto no debía aplicarse siempre en todos los valores, ya que decía que al ejercer ciertos valores se tenía que tomar en cuenta las circunstancias ( no se puede ser generoso con alguien que no es generoso), y que otros valores como la justicia se tenían que aplicar siendo objetivos, porque siempre se debe de dar lo que merece cada persona.
La virtud es el hábito del alma para la realización de la buena vida. En la que se debe perfeccionar las facultades o las potencias apetitivas, cuando se repite una actividad crea una facilidad en la acción lo que provoca que se obtenga un hábito, ya sea bueno o malo (virtud o vicio).
A diferencia de Santo Tomás, Aristóteles no conocía las virtudes teologales, estas virtudes teologales eran: la fe, la esperanza y la caridad. La fe, según Santo Tomás, es confiar en Dios y en su palabra, la esperanza es creer en la gracia de Dios, y la caridad es amar a Dios sobre todas las cosas y amar a tu prójimo como a ti mismo.
Otra diferencia era la consideración de que para la conducta buena no es suficiente que la razón nos enseñe correctamente el deber, además es preciso que la facultad apetitiva esté bien dispuesta mediante el hábito de la virtud moral. Dado que en el alma humana encontramos el entendimiento y las facultades apetitivas (la voluntad y el apetito inferior), y que las virtudes son perfecciones de dichas facultades, hay dos tipos generales  de virtudes, las intelectuales y las morales. Las virtudes intelectuales son HÁBITOS GRACIAS A LOS CUALES SE PERFECCIONA EL ENTENDIMIENTO PARA LOGRAR EL CONOCIMIENTO. Y las virtudes morales son HÁBITOS DEL ALMA QUE SE ADQUIRIDO CON LA REPETICIÓN PARA LA PERFECCIÓN DE LAS FACULTADES APETITIVAS Y LOGRAR LA VIDA BUENA.

VIRTUDES INTELECTUALES
Se divide en:
·         Entendimiento especulativo: cuyo objetivo es la contemplación de la verdad. Estas virtudes son:
     ·         La inteligencia o hábito para la contemplación de los primeros principios.
     ·         La ciencia o hábito para la posesión de las conclusiones a partir del razonamiento.
     ·         La sabiduría o hábito para la posesión de los principios más universales y de las primeras causas.
·         Entendimiento práctico: cuyo objetivo es la dirección de la conducta, tanto para producir artefactos útiles o bellos, como para alcanzar la vida buena y feliz.
      ·         El arte: virtud dirigida a la producción de artefactos
     ·         La ganadería, la agricultura, astronomía, música, caza, pesca, aritmética,   geometría, gramática, literatura, etc.
      ·         La prudencia: el saber lo que debemos hacer en cada caso.



VIRTUDES MORALES
·         Virtud que perfecciona el apetito superior o voluntad: la justicia; consiste en el hábito de dar lo que le corresponde a cada quien.
·         Virtudes que perfeccionan el apetito inferior (irascible y concupiscible): pasiones.

2.    SAN AGUSTIN
Su filosofía está inspirada en la filosofía platónica. Considera que el alma es una norma divina que la guía hacia la beatitud, más no basta conocer esta norma divina, es necesario ser movido hacia ella por medio del amor; por esta razón el imperativo ético fundamental del San Agustín es “Ama y haz lo que quieras”
Los principios que componen y en los que se inspira la filosofía de San Agustín son:
·         Interioridad: “No salgas de ti mismo, en tu interior reside la verdad”. Considera que el interior es semejante a un templo, en el cual uno debe afanarse por contemplar la luz de Dios.
·         Participación: Dice que todo bien o es bien por su misma naturaleza y esencia, o es bien por participación; en el primer caso es el Bien sumo, en el segundo caso es un bien limitado.
·         Inmutabilidad: El ser verdadero, genuino y auténtico es sólo el ser inmutable. No existe de alguna forma o en cierta medida, sino que es el Ser.
Dos temas esenciales: Dios y el hombre
·         Dios: Dios es el ser supremo, la primera verdad y el eterno amor. Se puede ascender a Dios por tres vías: la vía del ser, de la verdad y del amor.
·         El Hombre: Creación a imagen de Dios compuesto por el cuerpo y el espíritu. La cárcel del alma no es el cuerpo humano, sino el cuerpo corruptible; el alma no puede ser sin él dichosa. Ésta fue creada de la nada. Ha sido deformada por el pecado y será la gracia la encargada de restaurarla.
El Tiempo
El tiempo es creación de Dios, antes de crear el cielo y la tierra no había tiempo. Este implica un pasado, un futuro y un presente. Pero el pasado ya no existe y el futuro aún no es. En cuanto al presente es un continuado dejar de ser, un continuo tender hacia el no ser.

Ser, conocer, amar
A los grandes problemas del ser, conocer y amar, le da tres soluciones, que son la creación, la iluminación y la sabiduría o felicidad.
·         Creación: Dice que Dios creó todas las cosas de la nada. Todas las cosas son buenas porque las ha creado Dios, y las ha creado porque ha querido, el mal es defecto, privación. Dios no es la causa de ningún mal, solamente lo permite, ya que Él puede sacar bien del mal.
·         Iluminación: Afirma que los hombres percibimos la verdad de nuestras afirmaciones en la verdad inmutable. Así pues, la mente humana es iluminada divinamente y esto es el fundamento de la certeza de nuestros juicios.
·         Felicidad: El hombre obtiene la felicidad de Dios y esta felicidad es Dios mismo. Sólo Dios, y no los bienes temporales, puede hacernos felices.



VI. Conclusión
El cristianismo es una religión que ha alcanzado casi todo el mundo , ha perdurado a través de muchos siglos y es la religión más seguida del mundo debido a que tiene bases muy sólidas y con mucho sentido. El que exista una religión común ayuda a los países a mantenerse relativamente unidos y al mismo tiempo permite un cierto control sobre la gente, gracias al temor de alejarse de un buen lugar en el que nuestra alma repose después de la muerte.
Por la parte filosófica del cristianismo, fue un acontecimiento importante, pues se logró la unificación de ideas griegas con las creencias religiosas y a su vez la unificación de la misma con la religión. De este modo surge una filosofía que le permita al hombre actuar con cierta racionalidad siguiendo las normas religiosas.
Sin duda, el cristianismo ha sido uno de los aspectos más importantes y que más ha influido en el desarrollo de la sociedad, a través de los años. Y gracias a este es que surgen cuestiones, y da paso a otras corrientes filosóficas.
VII. Bibliografía

·         Escobar Valenzuela, Gustavo; Ética: Introducción a su problemática y su historia; Ed. Mac Graw Hill; Sexta Edición; México; 2008; pp. 125-130.
·         Baeza y Aceves, Leopoldo; Ética; Ed. Porrúa; Undécima Edición; México; 1973; pp. 181-188.